Una tenue llovisna a modo de riego de agua bendita acompaño todo el recorrido, mientras algunos pobladors se animaban a disfrutar desde el umbral de sus casas el paso de la cabalgata. En el recorrido participaron policia, bomberos y personal municipal, cuidando todos los detalles de seguridad, especialmente en el cruce de la ruta Naional 60. Al final del recorrido en el santuario San Roque fueron rrecibidos por el insesante sonar de las campanas del santuario, la alegría y emoción embargó a los jinetes que con porte erguido y orgullosos siguieron su paso de regreso hasta la estación Quilino, donde luego de interpretar el Himno Nacional Argentino, se dio incio a la primera jorana del Festival.