DIARIO DE TURISMO
Editado en Córdoba - Argentina

CORDOBA NORTEÑA

Reliquia histórica del norte cordobés Estancia Jesuítica de Jesús María

Es un Ícono arquitectónico en las entrañas de la ciudad, la Estancia de Jesús María se alza guardando entre sus muros parte del pasado histórico de trabajo y dedicación que desarrollaron los jesuitas en Córdoba.

Martes 23 de Octubre de 2018
  • Foto José Fossat
  • Foto José Fossat
  • Foto José Fossat

Dueña de una notable riqueza cultural y empapada de historia, la ciudad de Jesús María es uno de los destinos elegidos por excelencia. Es la cabecera del departamento Colón, ubicada a solo 50 kilómetros al norte de Córdoba capital que ofrece un verdadero abanico de ofertas turísticas

para todos los gustos. Sus orígenes fueron trazados en las tierras que los indígenas sanavirones reconocían con el nombre de “Guanusacate” que significaba “agua muerta o bañado”, aunque sería bajo la influencia y el asentamiento de los padres jesuitas que esta ciudad terminaría de adquirir su identidad. Hablar de Jesús María implica hacer alusión a la Estancia Jesuítica y su solemne construcción que la convierten en una obra majestuosa donde la mística y el pasado adquieren trascendencia. Mitad monasterio y mitad factoría, esta estancia alojó no sólo aborígenes sino también a esclavos cuyo trabajo en conjunto con los monjes dieron vida a una joya que está en pie y cuya impronta es palpable en cada uno de sus muros. Su construcción data de 1618 y se asemeja a otras obras construidas por esta misma Orden Religiosa aunque se la rememora por haber sido el segundo núcleo productivo organizado por la Compañía de Jesús. También es reconocida por su ubicación estratégica, ya que por su frente pasaba el Camino Real hacia la Capital del Virreinato y su producción vitivinícola de gran calidad y excelencia permitieron

posicionarla en un lugar que no hallo fronteras, aún en la actualidad. Cuenta la leyenda que la producción del vino el “Lagrimilla” elaborado a par􀆟r del mosto de 48 mil cepas cultivadas, fue el primer vino americano degustado en la mesa real de Felipe V en la capital madrileña. Esta monumental construcción deja entrever una de las más bellas obras de arquitectura colonial del país, en donde el conjunto monástico propio de la influencia europea se refleja en su iglesia, los muros rústicos del antiguo cementerio, los claustros para la permanencia de los monjes y los talleres y viviendas de indígenas. Recorrer esta magnífica obra supone además acceder a la residencia y la bodega, apreciar restos de antiguos molinos, perchel y tajamar. Su templo de fachada más bien sobria, está construido sobre una única nave abovedada y posee una destacada cúpula central al mejor es􀆟lo barroco, ornamentada con los más disímiles relieves que revelan la mano de artesanos indígenas. Tampoco es posible dejar de admirar la elegante espadaña de piedra que se luce armoniosa junto a la sacris􀆡a. La estancia fue declarada Monumento Histórico Nacional en 1941 y convertida en Museo Jesuítico Nacional en 1946. He aquí que pueda gozarse de un ambicioso y admirable paseo por su antigua bóveda ubicada en la planta baja y disfrutar de

una abundante y admirable colección de piezas arqueológicas, documentos, mobiliarios, pinturas, cerámicas y utensilios propios de los siglos XVII y XVIII; todos accesorios de la idiosincrasia de la región.

INFORMES

Cómo llegar: Desde Córdoba por ruta nacional 9 norte. Distancia: 50 kilómetros. La Estancia se

ubica al noroeste del casco urbano de la ciudad de Jesús María.

Horarios: Martes a viernes de 8 a 19 hs. Sábados, domingos y feriados de 10 a 18 hs.

Entrada libre y gratuita.

Visitas guiadas: De martes a viernes a las 9:00,

10:00, 11:00, 14:00, 15:00 y16:00

Sábados, domingos y feriados 11, 14, 16 hs.

Visitas grupales: Para visitar grupales,

llamar +54(03525) 420126 y reservar turno.

Estancia de Jesús María - Museo Jesuítico

Nacional. Pedro de Oñate S/N, Jesús María,

Córdoba

Teléfono: +54 (03525) 420126.-

E-mail: culturayturismo@jesusmaria.gov.ar