El pasado sábado 22 de octubre el Parque Nacional Chaco cumplió un nuevo aniversario e invita al turista a vivir un día en pleno contacto con la naturaleza, ideal para relajarse y pasar una hermosa estadía en familia o con amigos. Paseos en bicicleta, caminatas entre árboles autóctonos y avistaje de cientos de aves, son algunas de las propuestas que brinda esta reserva natural repleta de vida y encantos naturales. Rumbo al parque, a la distancia, se puede observar la exuberante flora propia del lugar: ceibos y jacarandaes florecidos. Entre la vasta y colorida flora, se destacan los quebrachos colorado y blanco, el espinillo colorado, el lapacho, el guayabí y el guayacán, entre otros. Los teros que avisan cuando alguien se acerca, monos, lechuzas y urracas también están al alcance de los ojos y las lentes fotográficas. Esta reserva ecológica cuenta con una amplia área de camping, mesas, agua potable, luz eléctrica y la constante presencia de guardaparques. Los senderos de interpretación son ideales para observar animales autóctonos, bajo el vuelo y el canto de los pájaros, haciendo de la travesía un momento placentero, para desconectarse de la rutina muy cerquita de la ciudad.