Muchos son los destinos que mas allá de su extraordinaria maravilla paisajística se pueden contar para seducir al lector y brindarle la motivación necesaria de viajar a Madryn, la ciudad cuenta  con 90.000 habitantes, dispone de una excelente y variada oferta turística, donde predomina el avistaje de las ballenas, los circuitos de aventura, buceo, City Tour y museos. También a solo 100 kilómetros de Madryn se llega a Península Valdéz, hasta Puerto Pirámides 25 kilómetros y 15 kilómetros a El Doradillo, sitios donde se observan la gran cantidad de ballenas que llegan en esta época del año. El avistaje comienza prácticamente desde la misma costanera frente al mar, es posible observarlas, saltando y soplando muy cerca de la costa, también desde los restaurantes ubicados en la costanera donde se ofrece una interesante y exclusiva gastronomía, completan un momento espléndido y lleno de placer. Puerto Madryn trabaja intensamente en la incorporación de la gastronomía, de hecho cuenta con una fecha donde se celebra Madryn al plato con invitados de gran jerarquía en este rubro. En este viaje nos proponemos contarles una breve experiencia del avistaje embarcado y ofrecerles la información necesaria para decidir visitar este destino y disfrutar de las maravillosas bondades que ofrece al turista.

Visitamos Puerto Pirámides

Llegando a Puerto Pirámides, nuestra imaginación viaja junto a una sensación de intriga, en esta experiencia nos espera uno de los cetáceos más grande que se conocen, luego de colocarnos todos los elementos que se requiere para la seguridad del turista y participar de una charla informativa por parte de los guías subimos a la embarcación. Navegamos por espacio de medio hora, nadie abre la boca, las miradas se pierden en el infinito buscando una señal, algo que indique que vamos a verlas, la expectativa es enorme… de pronto el capitán detiene los motores y señala hacia un lateral de la embarcación y allí aparece casi como si se tratara de una filmación en cámara lenta una de las ballenas dirigiéndose hacia la embarcación, exclamaciones de asombro en algunos y emoción en otros, todos alzan sus cámaras para fotografiar y filmar este momento. La ballena se desliza con tanta suavidad que parece acariciar las aguas, cruza bajo la embarcación como si supiera que no debe tocarla, gira y se ubica detrás de los motores de borda, pero ya no es una son dos, su pequeña cría la acompaña. Estamos justo en el lugar donde se concentraron empezamos a ver varias ballenas danzando en las aguas, algunas haciendo el clásico salto, otras sacan su cola como si aplaudieran golpeando las aguas con una suavidad increíble. La emoción aumenta cuando uno se da cuenta que están a solo centímetros. La sugerencia es que este es un viaje para agendar, están en el golfo hasta fin de año, hay muchas maneras de llegar en auto, transporte público y avión, los alojamientos cuentan con tarifas variadas para todo bolsillo, al igual que la gastronomía, Adrián Galvez Director de comunicación institucional nos cuenta que se está trabajando constantemente en la cuestión costos, buscando que el turista que llega a Madryn disfrute, se sienta cómodo, feliz, recomiende este destino y para que regrese.

Avistaje en El Doradillo

A solo 17 kilómetros del centro de Madryn se llega hasta la costa llamada El Doradillo, nos detenemos en el puesto del guarda parque quien nos recibe cordialmente y nos invita con mate mientras nos ofrece una interesante charla del trabajo que hacen para contabilizar el crecimiento en la reproducción de las ballenas y todo el trabajo para cuidar esto que podría llamarse el santuario de la ballena franca austral. Aquí las cuidan y protegen y ellas parecen saberlo, nos dirigimos a la costa, y ahí están deslizándose a menos de 10 metros de la costa, se levantan por momentos a respirar mientras se escucha el soplido, los turistas y niños se entusiasman ante este espectáculo, aquí es más frecuente ver a las madres con sus crías, van y vienen a lo largo de la costa, al fondo en el horizonte se ve la ciudad de Madryn. Sin duda estamos frente a una de las experiencias que se pueden calificar como especiales, esta vivencia no tiene precio y lo digo porque quiero invitar a todos nuestros lectores a que piensen que este es un viaje, que no termina cuando se van del destino, si no que quedará para siempre en sus memorias como una de increíble y hermosa experiencia compartida con la Ballena Franca Austral en Madryn.

Cuenta la historia de Puerto Madryn

El Velero Mimosa fue un barco en el que viajaron desde Liverpool, Reino Unido en 1865 un grupo de 153 colonos galeses (56 adultos casados, 33 solteros o viudos, 12 mujeres solteras, y 52 niños) a la Patagonia Argentina, en donde hasta entonces no había asentamientos poblacionales permanentes. El desembarco se produjo en el golfo Nuevo (en la zona de Puerto Madryn).

El 28 de Julio de 1865, llegaron a la costa del golfo 153 galeses a bordo del Barco “Mimosa” al desembarcar en este puerto natural, decidieron bautizarlo con el nombre de “Puerto Madryn” en homenaje a Love Jones Parry, quién fuera Barón del castillo de Madryn en el país de Gales, y fue uno de los precursores de la gesta galesa en la Patagonia Argentina. Inicialmente se instalaron en varias cuevas que se encontraban en la costa para organizarse y poco a poco fueron poblando la zona, aunque recién en 1886, cuando se construye la vía del ferrocarril que unía el asentamiento con la ciudad de Trelew, se produce el crecimiento y se transforma en la puerta de ingreso y salida de la producción de la colonia galesa. La ciudad crecía en pos del ferrocarril y la actividad portuaria, hasta que en la década del 60 se cierra la franquicia aduanera, lo que produce la caída de la actividad, especialmente de la Compañía Mercantil de Chubut y el mismo Ferrocarril Patagónico. Pero esto no desanima a los pobladores quienes se mantienen firmes y expectantes a nuevas actividades para desarrollar. La fortuna tocaría el destino de Madryn, en los años 70 se instala la fábrica productora de aluminio, lo que permite la radicación industrial de otras empresas generando fuentes de trabajo y afianzando el crecimiento de la ciudad. Hoy es uno de los destinos más atractivos de la República Argentina, la presencia en el golfo de la ballena franca austral, la actividad de buceo, forman parte del itinerario en la propuesta turística de Madryn, conocida también como “Capital del Buceo”.